4 muslos de pollo grandes.
4 lonchas de jamón.
4 lonchas de queso de oveja.
Aceite de oliva. Sal y pimienta.
2 pimientos del piquillo.
Medio vaso de nata. Media cebolla.
Preparación:
Deshuesamos los muslos de pollo cuidando de dejar toda la piel sin romper.
Salpimentamos cada muslo, y ponemos encima de cada uno, una loncha de jamón y otra de queso, enrollamos los muslos y los atamos con cordel de cocina.
Ponemos una sartén con un chorro de aceite y cuando esté bien caliente echamos los muslos y los doramos por todos los lados, los sacamos y los ponemos en una fuente de horno con una cucharada del aceite de freírlos y la media cebolla partida en cuatro trozos.
Calentamos el horno a 180º grados y cuando esté caliente metemos los muslos y los asamos durante 15 minutos.
Una vez que los sacamos del horno los ponemos en un plato y en la fuente donde los hemos asado echamos tres o cuatro cucharadas soperas de agua y rascamos todos los restos del asado y la cebolla.
Ponemos todo esto en el vaso de la batidora junto a los dos pimientos del piquillo y la nata y trituramos bien, lo salpimentamos y ponemos en un cazo, dejamos que hierva muy despacio durante cinco minutos.
Presentación:
Quitamos el cordel a los muslos, los partimos en tres rodajas cada uno y los servimos con ensalada y la salsa aparte en salsera.
